5 LA CABAÑA TURQUESA
Las clases en el colegio Hogwarts de magia y hechicería habían comenzado… todo había sido normal en los cursos de quinto año, con las ya acostumbradas advertencias, e indicaciones, que los hechizos se complicarían y que el estudio seria mas duro, ya que esta vez los alumnos presentarían sus TIMOS, por lo que habría mas tiempo libre, pero dedicado única y exclusivamente para estudiar…Los alumnos de cursos inferiores habían transcurrido normalmente con sus nuevas enseñanzas. La tarde había llegado y junto con ella la hora de la comida, como era de esperarse el gran salón estaría abarrotada de alumnos hambrientos que devoraban lo que los elfos domésticos prepararon… Pero el día de hoy era completamente diferente, ningún alumno se encontraba a esa hora en el gran salón, mas bien un grupo de magos artesanos se encontraban ocupando el lugar, haciendo modificaciones a la ahora nueva mesa del comedor…
- Todo por no pensar correctamente y dejarse llevar por la emociones… Director…- Una sarcástica voz resonó en el casi vació lugar.
-oh Minnie, pero es que el momento era preciso, era emotivo… no puedes culparme- Dijo el hombre de cabello plateado como disculpa. La profesora Mc Gonagall solo entrecerró los ojos y miro atentamente como los artesanos, hacían las modificaciones en las esquinas de las mesas para que estas se abrieran dando paso a los asientos interiores y los alumnos pudieran tener acceso a esos lugares.
Anteriormente en otros años, los alumnos acudían con irregularidad a la hora de tomar sus alimentos, algunos solo la tomaban y preferían ir a comer sus alimentos, a los jardines o junto al lago… o simplemente no iban todos a una misma hora, pero parecía que esto había cambiado, y la modificación del comedor se había hecho tan popular que ahora los alumnos eran puntuales y todos se reunían sin falta alguna en el gran salón, entonces el problema comenzó con cada hora de comida, al estar unidas las cuatro mesas, no había acceso disponible a los asientos interiores… los alumnos comenzaron a pasar por debajo y encima de la mesa, causando accidentes como derrames de comida, platos rotos, golpes en la cabeza, caídas estrepitosas, siendo este el motivo de el aumento de trabajo para los elfos domésticos, que de inmediato fue detectado por la presidenta y representante de sindicato ante el ministerio, Hermione Granger que inmediatamente mando una enérgica carta al jefe del colegio, en este caso el director exigiendo una respuesta y explicación…por el repentino aumento de utilización de magia de los elfos sin alguna previa notificación, ni retribución extra en sus salarios.
Otra situación que se presento es que la enfermería nunca antes había estado tan abarrotada- Parece que estamos en guerra- se quejo madame Pomfrey… debido a los constantes accidéntenles como descalabradas, torceduras de tobillos y raspones en múltiples partes de l cuerpo que se provocaban los alumnos al cruzar por encima de la mesa o pasar debajo de ella.
El hechizo que el director había hecho, fue tan solidó que la mesa se hizo irrompible así que hubo necesidad de llamar a magos artesanos para reparar el desbarajuste…
Por consecuencia las casas nunca antes habían estado tan desunidas como en esos momentos ya que cada uno de sus alumnos comían en el interior de su sala común.
- Fantástica tu idea Potter, unión de casas…- fue el comentario amargo de una apretujada Joan que se acomodaba en el sillón…-
-No te sientes aquí y ni te quejes, que es tu familia la que esta haciendo la modificación, eso les traerá muy buenos galeones que tanta falta te hacen y así te compren una vida…-
-¿que dijiste? ¡Retráctate inmediatamente Potter…!- ordeno energéticamente la pelirroja, mientras lo agarraba y estiraba una de sus orejas de un molesto James… que perdiendo la paciencia ante el atrevimiento de su compañera.- ¡Lárgate de mi sillón!- grito exasperado, safandose de su oreja y sacándola a empujones del lugar inmediatamente… Joan puso resistencia y entonces James la cargo en brazos sorprendiéndola, dejándola completamente muda, cruzo con ella por la gran sala y la aventó en un sillón junto a Lucas Segmus, desenfundo la varita y apuntando al sillón donde había estaba sentado anteriormente, el mismo que ocupaban Oscar y Jonathan en ese momento, dijo- patrocinium snitch…- e inmediatamente en el sillón comenzaron a aparecer pequeñas Snitchs bordadas, que a simple vista parecían unos adornos, pero eran mucho mas peligrosas-
-oh, has puesto nuevamente la protección James…- un educado Jonathan preguntaba mientras James volvía a tomar asiento y afirmo sorbiendo algo de su sopa. El sillón de las Snitchs, como le conocían los habitantes de la sala común, era un sofá para tres personas que le había gustado a Jonathan cuando habían pisado por primera vez la gran sala común de su casa y arbitrariamente se habían adueñado James y Oscar, colocándole un hechizo, donde le aparecían Snitchs bordadas. Estas Snitchs servían para evitar que cualquier otro alumno que no fuera ellos se sentara en el, los alumnos ya habían experimentado en algunas ocasiones los dolorosos métodos del mueble para no ser ocupado por los que no eran sus dueños…-
-Sabes hermano, yo creo que esa mujer esta enamorada de ti…- saco en conclusión Oscar después de meditarlo un rato al mismo tiempo que engullía de un solo bocado una empanada de cerdo y zetas.
-mastica antes de hablar…- índico Jonathan mientras removía sus gafas que por fin había encontrado.-
-No me eches a perder la comida… a esa dudo que los hombres le gusten, es tan poco femenina y sin gracia que me dan escalofríos, para que me entiendas, esa es una marimacho…- susurro James como en secreto, mientras se decidía si tomaba un pan de centeno negro o uno de cebolla.
-A quien le dices marimacho, engreído idiota…- una voz detrás de ellos se escucho y delante de sus ojos Joan Princess lo miraba furiosa con los brazos cruzados, dispuesta a la revancha. Las mejillas de la muchacha ardían furiosas ante la humillación de ser cargada y luego aventada como saco de papas.
Han notado que una urraca se ha escapado y esta haciendo todo un alboroto- fue lo que obtuvo por respuesta de James-
-¡a quien le dices urraca!- y sin esperar poso su mano en el sillón siendo inmediatamente aventada a dos metros de distancia de este de una manera nada agradable, los demás alumnos ni se inmutaron, ella había tocado el sillón de las snitchs, sabiendo que James Potter lo había hechizado.
Ya sabían de los arranques que solían tener sus dos nuevos prefectos y se preguntaban si el director había estado cuerdo o en sus cinco sentidos cuando los eligió como pareja de nuevo prefectos, nadie ponía en duda que ellos dos eran los mas talentosos de su curso, pero era obvio la antipatía del uno hacia el otro que salían por cada uno de sus poros, aunque nadie nunca comprendía las locas desiciones de su director, tampoco ponían objeción a ellas. Los alumnos de gryffindor ya estaban acostumbrados a ver algunas veces a James salir disparado o con las orejas más grandes de lo normal, otras veces era como en esa ocasión ella la que salía perdiendo. Era algo tan común que siguieron comiendo. Solo Samantha Bohan, su amiga corrió a ayudarla reclamando- Esta vez te has pasado James Potter-
-¡jaaaaaaaaaaaa!, a ver si así te enseñas a tocar lo que no te pertenece y me dejas comer en paz…, hasta que obtuviste lo que te mereces….- grito en burla a la chica que no se levantaba del suelo, James seguía mofándose y riéndose, ella se levanto y simplemente se fue, saliendo de la sala común, dejando hablando solo a su atacante-
- Te has pasado…- le dijo Jonathan que observaba hacia la puerta donde había salido huyendo la chica, pero James no dijo nada, solo veía hacia la puerta también-
- Oh no te pongas sentimental. Ella se lo busco Jonhy… ella lo provoco, siempre corriendo detrás de James, necia a sentarse a su lado, siempre vigilándonos para ver que hacemos e ir corriendo a dar la queja.
De todo lo desastroso que pasa, supone que fuimos nosotros, bueno en algunas ocasiones, bueno en casi todas las ocasiones es cierto, pero es una lata que de todo chismee…- defendió vehementemente Oscar, quien le recordaba a Jonathan el porque no había que tener compasión hacia Joan Princess.
- Como dice Oz… ella se lo busca…- fue lo único que pronuncio James, mientras se sentó observando su comida-.
Algunas semanas habían pasado ya en el colegio, el comedor había quedado listo y las clases seguían con regularidad.
Lily caminaba junto con Hugo y William hacia la entrada del bosque prohibido, pasaron junto a la casa de Hagrid y que la cabaña donde vivía.-
-esa es la casa de Hagrid?- pregunto señalando a el inmueble que estaba pintada de azul Turquesa, muy llamativo, sus ventanas con marcos rosas, estaban rodeadas de flores y de sus jardines llegaban agradables olores, había algunas parcelitas con vegetales sembrados y del otro lado se secaba la ropa del semigigante recién lavada. A Lily le pareció encantadora, impresionada porque Hagrid no parecía del tipo que viviera en un tipo de casita de muñecas y no recordaba que alguien le hubiera mencionado ese aspecto de la cabaña…
Hugo la miraba raro- No me mires, no puedo creerlo- contesto, también, pensaba que había algun error porque ese pintoresco lugar desentonaba con todo lo misterioso y algo lúgubre de Hogwarts… y sobre todo con la personalidad de Hagrid…
William solo se dedico a entrecerrar algo los ojos, parecía que para la percepción de estos, el color de la cabaña los lastimaba.
Siguieron caminando y vieron a los lejos un bulto azul grande, acompañado de otro gigante, cuando fueron acercándose los alumnos distinguieron a su nuevo profesor.
Hagrid se encontraba sonriente y muy erguido, enfundado en un saco de piel felpudo color azul cielo con una corbata rosa y peinado relamidamente para atrás… a su lado su gigante hermano menor el ahora pacifico Grawp, que también traía su cabello relamido como su hermano mayor, pero partido en dos, muy al estilo del famoso peinado de librito, estaba mas limpio de lo normal y llevaba lo que parecía una tela cocida como un gran cuadro al que le habían hecho un agujero para la cabeza y dos agujeros a los costados para que sacara los brazos, amarrado por una enorme cuerda del mismo color que la corbata de Hagrid que se amarraba a su cintura, todo el conjunto igual que el profesor en azul cielo…pero lo mas increíble es que el gigante traía puesto unas medias blancas a las que algunos bellos de las piernas se le salían y zapatos a su medida de tacón bajo… algunos alumnos se reían discretamente…y otros dudaban de la capacidad del maestro ante semejante imagen que proyectaba…
- Hagrid... digo profesor Hagrid eh… que…-Lily penso en decir, que te paso, quien t6e odia tanto para vestirte así, pero creyo que era muy grosero, así que resolvio diciendo- que… elegante…-
-Oh, en serio lo crees. Muchas gracias Lily, yo creí que me veía algo llamativo por el color, pero mi esposa me dijo que el primer día de clases tenia que ir lo mas elegante para ganar respeto, era imperdonable que no me viera presentable este día… y tenia que impactar a toda costa…- concluyo Hagrid algo nervioso…
-Oh, pues… nos ha impactado profesor- se aventuro decir Zacarías Stone de Slytherin con tono de burla, recibiendo una mirada amenazante de Hugo-tienes toda nuestra atención maestro…- dijo el Weasley que ahora comprendía quien era la causante de tal atrocidad sobre Hagrid y Grawp que se removía impaciente por las medias que traía-
Bienvenidos, ah… pues la clase de cuidado de criaturas mágicas…- Comenzó nerviosamente Hagrid ante la mirada atenta de todos y tomando valor continuo- en esta clase conoceremos a distintas especies… de todos los lugares… animales fantásticos y pues… ehmm…- se quedo cayado y leyó algo escrito en su mano- ah si y sus cuidados, tendremos el apoyo de mi ayudante y hermano el gigante Grawp- dijo Hagrid presentando a Grawp y señalándolo, pero el gigante se encontraba muy ocupado rascándose la nalga debido al escozor de las medias… ante la mirada divertida de los alumnos. Lily no pudo suprimir una sonrisa por el espectáculo y vio que Hugo tampoco lo disimulaba, dejo de sonreír hasta que observo como William miraba sorprendido y con todo respeto a la criatura gigantesca que tenia frente a el.
Hagrid algo discretamente se acerco a su hermano y susurro- tú turno Grawpi- el gigante dejo de rascarse y torpemente volteo haciendo una mueca y una reverencia exagerada como saludo…-
-perfecto- dijo orgulloso Hagrid que miraba con adoración a su hermano y prosiguió.
-Bueno, el día de hoy… alumnos… les tengo una gran sorpresa. Por favor síganme y hagan una…ord…-leyó nuevamente la mano, pero vio que lo que había escrito se había borrado por el sudor nervioso que producía y concluyo- bueno no se separen…
Hagrid comenzó a caminar seguidos inmediatamente por el grupo de niños que emocionados se internaban al bosque… seguidos de Grawp que seguía en su labor de quitarse la comezón al recargarse en cualquier árbol en cuanto hubiera oportunidad.
Después de caminar unos diez minutos llegaron a un lugar algo silencioso y tranquilo, Hagrid les indico…-
-Bien este día conoceremos al hermoso hipogrifo, una hermosa y noble criatura de elegancia sin igual, pero nunca la ofendan porque son muy orgullosos y podrían estar en peligro- Los alumnos comenzaron a murmurar emocionados.-
-oh genial Lily un hipogrifo, Hagrid es estupendo, un hipogrifo en la primera clase- expreso Hugo mientras miraba emocionado para todos lados, viendo si descubría a la criatura-
-¿que es un hipogrifo?- fue el comentario de William, que había oído hablar sobre ese animal, pero no tenia idea de cómo era. Su abuela nunca había podido explicárselo…
Y llevándose los dedos a la boca, Hagrid silbo, segundos después un enorme animal cruzo entre los arboles con paso lento y cansado, El viejo Buckbeack hacia su aparición- muchos miraron desanimados al hipogrifo anciano que parecía mas en el otro mundo que en este...
Pero para William en su memoria nunca olvidaría ese primer encuentro de la primera clase de Hagrid, William lo vio espectacular, nunca había visto un ejemplar tan bello con cabeza de águila y cuerpo de caballo de enormes alas que ahora tenía sin extender.
-¿eso es un hipogrifo? ¡Es hermoso profesor!- exclamo William excitado en voz alta ante la mirada atónita de los otros compañeros que no comprendían la definición de hermoso del pelirrojo-
-Oh, si es un animal estupendo ¿bien quien quiere ser el primero?- volteo alegremente Hagrid y miro a todos, entusiasmado porque los Slytherin parecían mas cooperativos que los de grados superiores, hubo un silencio por parte de todos y de pronto William se vio adelante empujado por Hugo – Oh, el pelirrojo de Slytherin es el voluntario- dijo jovial el profesor, mientras preparaba a Buckbeack, William asesino con la mirada a Hugo si hubiera sido eso posible y se convirtió voluntariamente a fuerzas el elegido para la demostración.
-mira te inclinaras respetuosamente sin dejar de verlo a los ojos y si el, inclina la cabeza ¡estupendo!- dijo Hagrid, William entendió todo a la perfección pero una pregunta le cruzo por la mente y dirigiéndose a Hagrid dijo…-
-y si no se inclina profesor…-
-Oh, pues entonces, pues… ¡ya improvisaremos…! Y rogaremos porque eso no pase- fue la simple respuesta obtenida ante un William que entro en pánico.
-¿como te llamas muchacho?- pregunto Hagrid que seguía viendo a Buckbeack-
Me llamo William Evans profesor- diciendo esto William lo volteo a ver un momento y Hagrid que había quedado pasmado por el apellido del chico, fue cuando se percato completamente de sus ojos y no supo que hacer, se sintió confundido.
William se inclino como le había dicho Hagrid y el hipogrifo lo miro a los ojos y por un momento los dos se miraron fijamente, los ojos del hipogrifo brillaron de emoción y Buckbeack pareció recuperar su orgullo, ya que lo confundió con aquel chiquillo de cabellos despeinados y ojos verdes cubiertos por unos redondos lentes con una legendaria cicatriz en forma de rayo que lo había montado haciéndolo sentir tan bien, respondió al saludo, recuperando el viró de la juventud, golpeo suavemente el vientre del semigigante con su cabeza y este despertó de su trance, entendió el mensaje, tomo a William de los costados-
-¡¿Profesor, profesor que hace?- grito William, que pateaba nerviosamente y fue montado en los costados de Buckbeack, todos los demás pequeños lo miraban asustados, otros asombrados, Lily lo miraba maravillada y Hugo divertido. Hagrid dio una palmada al trasero de la bestia. El pelirrojo sintió de pronto como el animal comenzaba a trotar y se aferro a su cuello asustado, Lily lo animaba emocionada pero Buckbeack comenzó a caminar alejándose de ahí y llevándose al chiquillo, que ya para ese momento llamaba al profesor a grito abierto, y se agarraba aun mas al fuerte y musculoso cuerpo de la criatura, el hipogrifo comenzó a correr y el niño agarrado fuertemente con sus piernas en el costado sintió pánico, quería mirar, pero al abrir los ojos solo veía manchas a su alrededor por la velocidad que habían alcanzado y de pronto lo sintió, un impulso y aquel sentimiento de vació en su estomago como cuando a la montaña rusa se subió con su padre y esta comenzó a ascender, regreso…
-es como ese día, cuando Buckbeack fue montado por primera vez por Harry Potter-
Dijo en un susurro Hagrid que fue escuchado por Lily-
-¡¿ese es el Buckbeack de mi padre?- pregunto emocionada Lily que miraba al cielo tratando de no perder de vista a William.
No quiso abrir los ojos, pero el podía sentir el batir de las alas en sus piernas, el viento en su rostro le indicaban que habían dejado hace mucho tiempo atrás el suelo. Un sonido que produjo el animal hizo que el abriera sus ojos y lo que vio lo enmudeció.
Ante sus ojos podía ver el castillo Hogwarts en toda su magnitud, era enorme llevaba algunos días ahí y nunca creyó que fuera así de inmenso e interminable, también vio el bosque prohibido y pudo mirar a el gigante que acompañaba a Hagrid rascándose sobre una enorme piedra sus posteriores, vio a los compañeros de su clase, pero solo parecían a esa altura pequeñas hormigas. William jamás imagino que esas cosas existieran, siempre había creído que solo eran rumores de cuentos que contaban a los niños, pero no era así, era verdad, ese mundo existía y lo mejor es que era su mundo y el estudiaba para ser un mago y permanecer ahí…
Buckbeack viro hacia su derecha y descendió hacia el lago planeándolo, William aprecio vida dentro de este, pudo ver su propio reflejo y el agua era en una parte tan cristalina que vio como las sirenas y los ondinos lo seguían, nadando a la misma velocidad que ellos planeaban, sintió la necesidad de extender las manos para sentir el viento, nunca había sentido una libertad como esa, siempre ocultando sus habilidades y siendo rechazado por los demás, realmente estaba feliz que esa carta le hubiera llegado.
Pensó en Lily y como quería que ella estuviera montando a su lado en esos momentos, le diría a Hagrid si el orgulloso animal les permitiría montar a los dos a la vez… estaba seguro que ella lo disfrutaría mucho… pensó optimista, pero algo lo saco de sus pensamientos y escucho algunos aletazos bruscos a su lado, entonces volteo rápidamente y a su lado, una especie de caballos esqueléticos y oscuros que volaban con sus alas como de murciélago junto con el hipogrifo, habían aparecido, haciendo que este se elevara juguetonamente, y de nuevo el pelirrojo sintió el movimiento en su estomago indicándole que Buckbeack tomaba altura, las nuevas criaturas lo siguieron y se perdieron entre las nubes. William quedo empapado por la humedad de estas y el frío golpeo en su cara, pero estaba fascinado.
Después de volar unos minutos haciendo unos giros, metiéndose entre las nubes, algo paso junto a ellos, las oscuras criaturas se alejaron y el hipogrifo se puso inquieto, fue cuando lo vio, la sombra de aquella noche apareció volando rápidamente a su lado y los arrebazo, envistiéndolo por el otro lado y haciendo que el hipogrifo cambiara de dirección tratando de regresar al bosque, William volvió a sentir miedo y se abrazo del plumaje de Buckbeack, quien viraba rápidamente, cuando la necesidad de abrir los ojos lo venció, vio ahí volando a su lado a la silueta humana que parecía montado en algo, pero su rostro se distorsionaba, este de pronto estiro una mano para alcanzarlo y sin saber por que William levanto su brazo también y trato de alcanzarlo.
Lo que sintió después fue inexplicable, el ser emanaba tristeza, confusión y desesperación, William sabia muy bien que esa tristeza no era de el, pero aun así no podía evitar tener empatia hacia el sentimiento, el ser estuvo a punto de tocarle los dedos, pero buckbeack se incorporo sobre sus dos patas y lo ataco, no lo golpeo pero lo ahuyento, alejándolo, aunque a su vez, con sus reparos en el aire causo que William perdiera el equilibrio se soltara y cayera al vació.
William sentía como caía lentamente y muchos sonidos, mucha confusión imágenes que no eran de el, imágenes de personas que nunca había visto llenaba su cabeza, el sentimiento era tan insoportable y el seguía cayendo, el viento zumbaba en sus oídos, entonces no pudo resistir mas y perdió el conocimiento.
-Lo siguiente que vio fueron las flores que estaban a su lado sobre un enorme buró… y empezó a ver que estaba en un cuarto femeninamente arreglado, con cosas que eran mucho mas grandes de lo normal, había algunas lámparas que funcionaban con un polvo que giraba rápidamente dentro de la campana de la lámpara, la cama donde estaba tenia sabanas de satín y llevaba doseles de tul y encaje muy fino, cerca de ahí, había un enorme tocador de madera fina y elegantes acabados y brocados, donde acomodadas en hilera, estaban un montón de pociones y algunos cabellos plateados finamente trenzados…alhajaros dorados estaban junto al espejo y un cepillo gigantesco de lo que parecía ser oro también se encontraba ahí, William bajo de la enorme cama algo sorprendido por el lugar y noto que iba descalzo al sentir la suavidad de la alfombra… paso por el inmenso armario, donde su puerta se encontraba entreabierta y vio las prendas dentro de el, algunas se alcanzaban a ver bordadas con piedras preciosas, otras con plumas y algunas eran de piel… también alcanzo a ver una docena de pelucas. Tomo el picaporte de la puerta blanca, y este también era mucho más grande de lo normal, tanto que tubo que abrir con ambas manos…
Al salir se vio inmediatamente envuelto por los calidos brazos de una Lily Potter, que hablaba sin parar inundándolo de muchas preguntas… cuando el pudo calmar a su amiga pelirroja, vio que se encontraban también ahí Hugo algo avergonzado y su hermana Rose que lo miraba sentada desde una enorme mesa blanca y noto también que ahí había otra persona.
Era una mujer enorme, que bestia con un alminodado vestido color amarillo claro, de mangas anchas y adornadas con encajes, de esos que su abuela también solía llevar muy al estilo de los años 60, sobre el, un mandil impecablemente blanco como la mayoría de muebles que había ahí, noto que estaba peinada estilizadamente en un complicado moño y pintada algo exagerado, en tonos pastel, pero que parecía, iba con el estilo de la mujer…
-Como te sientes jovengsito…- pregunto con perfecto acento francés al pelirrojo- yo muy bien madame, gracias…
-¡Oh, pego que jovengsito mags encantadog! Te segvigue una tasa de prepagado de miel y flogues cugltivadog pog Hadas... delicioso- y sin mas se metio a la puerta que estaba frente a ella y se pudo escuchar como daba ordenes a otra persona, quien se encontraba preparando la comida.
-Acabas de conocer a la profesora Máxime y nos encontramos en la casa del profesor Hagrid, te has desmayado en un a practica ¿Cómo te sientes William?- pregunto Rose-
-yo bien supongo…- contesto William, impresionado por la noticia y por que esa fuera la cabaña que había visto por fuera antes…
-en serio Willo, porque parecías muerto- esta vez fue Lily quien nerviosamente preguntaba-
-En serio, así que me desmaye…- fue la respuesta que Willo dio con una sonrisa, pero noto que Hugo trataba de decirle algo… y se arrepentía escondiéndose detrás de su hermana…-
-Hugo, no tienes nada que decirle…- dijo la castaña mientras motivaba a su hermano a salir detrás de ella, Hugo por fin salio y con la mirada al suelo se dirigió a William-
-siento haberte… haberte empujado para que fueras el voluntario-
-¿Qué dices? Si es la mejor experiencia que eh tenido, se sentía tan libre, y era volar... vi todo el castillo fue impactante…el hipogrifo… ¡Lily debemos intentarlo!
-puegs creog que egl Hipogrifo no pogdra volag en algun tiegmpo…- interrumpió madame Máxime, que llevaba una tetera y algunos pastelillos en las manos, acompañada de una pequeña elfina que cargaba una charola de galletas…-
-¿que dijo, profesora Máxime?- dijo William…-
-progfesoga Hagrid queguido, sea lo que sea que te haya pasadog alla aguiba, provoco que hiciegan un ateguizaje fogzoso, porgque Buckbeack te llevaba colgando de la túnica en el pico y al desendegr sin controgl una de lags gamas atravesog su ala. Mundi Ahoga mi maguido junto con mi cuñado, lo egsta atendiengdo-
-oh, no ¿donde esta?- egsta en el corral…- indico la semi gigante, mientras William era llevado por Hugo al lugar-
-cuando tu montaste a buckbeack desaparecieron unos momentos y después Grawp los diviso, y corrió junto con Hagrid, al centro del bosque porque Buckbeack te traía colgando de la túnica y se veía que tenia problemas para aterrizar, así que Grawp los tuvo que atrapar en el aire…al perforarse una de las alas con una rama de Buckbeack- le comenzó a explicar Lily a William que asentía a todo lo que escuchaba-
Oportunamente la profesora Hagrid había llegado para llevar algunos bocadillos para que alimentáramos a Buckbeack y revisándote, le indico a Hagrid que te trajera a casa que solo estabas inconciente y el que ocupaba atención era Buckbeack, paro la hemorragia de la ala de este y nos llevo a los demás a ver el kappa recién traído de Japón para examinarlo, así Hagrid pues no tendría problemas en su primer día de clases y nosotros terminamos viendo al kappa que era asignado para los de tercero y así no hubiera quejas contra el, al terminar, la seguimos directo a la cabaña para ver como estabas pero seguías dormido.
-¿Qué te paso aya arriba?- pregunto el Weasley terminando de narrar los hechos que habían pasado…-
-supongo que me dio vértigo y me desmaye, no recuerdo muy bien- mintió el pelirrojo decidió, que le contaría a Lily y a Scorpius que había tenido un nuevo encuentro con el ser que ya los tres habían visto.
Mientras llegaban a un enorme corral fuera de la casa, ahí se encontraba Hagrid colocándole un ungüento regenerativo a la ala perforada de un ya Buckbeack que se encontraba tranquilizado por Albus que estaba vestido con el uniforme de quidditch, quien charlaba con el animal, sentado cerca de ellos Grawp miraba con atención cruzado de piernas las cuales traían las medias hechas jirones y no parecían que sus zapatos estuvieran cerca, por lo que iba descalzo ya para ese entonces.
-Profesor…- irrumpió William que miraba desde la puerta…-
Oh William! ¿Cómo te encuentras?-
-bien profesor, ¿Cómo esta el?- contesto preguntando mientras señalaba al hipogrifo que seguía atento a lo que Albus le narraba-
William tuvo que contarles que no recordaba mucho de lo que paso, y aclaro que no fue Buckbeack quien lo tumbo, que el había perdido el equilibrio al sentir vértigo y pareció que todos quedaron conformes con la explicación, Albus permitió que William acariciara al herido animal, ya que el segundo hijo de los Potter desde la primera clase de criaturas mágicas con Hagrid se había apropiado de el…reclamando su derecho cuando se entero que el animal le pertenecía a Harry y acudía los sábados a cepillarlo y pasearlo, así que cuando se entero del incidente, abandono la practica de quidditch y entro de lleno como apoyo para las curaciones al hipogrifo.
Todos se quedaron a comer esa tarde con Hagrid y su esposa, que improvisadamente sacaron mesas al jardín para que Grawp comiera junto con ellos. A decir verdad la calidad de comida que ahora ofrecían los Hagrid, era mucho de mejor sabor y mas suculenta que cuando el profesor era soltero y todo gracias a madame Máxime y Winky la elfina que ahora servia a la familia de semigigantes, puesta a disposición como regalo de bodas por la dirección del colegio hacia Hagrid, eran las responsable de ahora los deliciosos postres franceses que para ese momento ya comían.
Lily junto con Hugo y William se enteraron que ella seria su profesora de la nueva asignatura que tenia como 5 años de antigüedad impartiéndose en Hogwarts, coincidiendo con el tiempo que la semigigante tenia de haberse convertido en la señora de Hagrid habiendo renunciado a la dirección de Beauxbatons… noticia que sorprendió a William que no imaginaba a la encantadora señora Hagrid dirigiendo una escuela francesa.
Madame Máxime había conseguido el puesto como profesora de "Economía mágica del hogar" donde los alumnos aprendían a como organizar una casa mágicamente, así como hechizos desde los mas sencillos como fregar unos platos o hechizar una escoba para que barriera ella sola, hasta como poner a limpiar toda la casa con múltiples hechizos diferentes a la vez. Recetas para cocinar etc. Esta materia claro esta, fue sugerida por el ministerio, que cansado de la sobresaturación de magia invertida en hechizos de reparación por magos jóvenes que se aventuraban a vivir solos, sin saber manejar cualquier hechizo elemental para la limpieza del hogar, decidió aleccionar a los futuros magos para evitar esos derrochamientos innecesarios de magia y siendo aprobada por el Director, Blade Adrián Narcissus, Se le dio una prioridad de que los alumnos los deberían llevar por los siete años que cursaran ahí, dándole la clasificación de materia obligatoria.
La hora de comida llego a su fin entre anécdotas de Hagrid y consejos amorosas para Rose y Lily por parte de la profesora Olympe Hagrid. Los alumnos debieron continuar sus clases vespertinas…
William busco su túnica, pero Hagrid menciono que se había caído cuando aterrizaron, y que Grawp la había buscado pero no la encontró. William no dio importancia y dijo que tenia consigo como 5 mas, ya que su abuela las había comprado insistiendo en que el crecía rápido…
Todos regresaron a sus clases despidiéndose amablemente y recibiendo una invitación para regresar prontamente, Albus acepto la petición de William sobre acompañarlo los sábados para atender el hipogrifo, el segundo hijo de los Potter se convenció que si su Buckbeack había dejado montar al Slytherin y por protegerlo había arriesgo su vida, bien valía darle la oportunidad de conocer al chiquillo y así de paso saber con que clase de amistades se juntaba su pequeña hermana.
Emprendieron camino y dijeron adiós a la cabaña azul turquesa de Hagrid y a sus ocupantes…
La noche había caído ya en ese momento en Hogwarts, y la mayoría de sus alumnos ocupaban y se preparaban para las clases del siguiente día en sus respectivas salas comunes, Lily Potter en ese momento encontraba muy entretenido el observar la alfombra verde del lugar mientras escuchaba sentada junto a Scorpius algunos de los sucesos de ese día que eran narrados por William.
Nuevamente un ataque de nervios se había apoderado de ella, al ver entrar a Scorpius Malfoy con su cabello desordenado ataviado con el uniforme de quidditch de buscador del equipo de Slytherin. La chiquilla había quedado muda y quiso brincarle encima a William para callarlo cuando este lo llamo inmediatamente al entrar para que platicara con ellos, ni siquiera le permitió que el chico rubio fuera a ducharse…
-Bien… te caíste y sobreviviste Charles, felicidades, ahora tengo que irme a duchar- dijo ya algo impaciente Scorpius… que se levantaba
-No, espera… todavía hay algo mas. Yo como te había comentado, me caí del hipogrifo, pero no fue por vértigo- explico William ante la mirada atónita de Lily que por fin había levantado la mirada y Scorpius volvió a tomar asiento-
Pero tú dijiste que te había dado vértigo- le recordó la pelirroja a lo que William negó con la cabeza-
-No, yo vi, yo lo vi Scorpius, aquella sombra que nos ataco en el pasillo, la que se tragaba la luz de las antorchas, ella podía volar… estaba como montado a algo, pero podía volar… y acerco su mano, su mano casi toco la mía y sentí su tristeza y su desesperación y fue cuando yo caí… Buckbeack lo ahuyento, pero yo perdí el equilibrio y caí, no puedo explicarlo, simplemente caí, y vi imágenes, personas que yo no conocía, lugares que yo no conocía… todo fue tan confuso, yo por eso no podía decirle a alguien que no hubiera visto lo que nosotros vimos, por eso me calle… lo siento Lily…
-A ver dices que el fantasma que nos ataco en el pasillo ahora vuela y te ataco por el aire, haciéndote sentir su tristeza…- resumió Scorpius que miraba al fuego que crujía en la chimenea de su sala… William inmediatamente asintió y el rubio continuo.-
Yo nunca eh leído sobre algo así. La descripción que mas se acerca son los dementotes pero… un dementor te hace sentir tú tristeza, no, su tristeza y te hace recordar tus peores recuerdos no los de ellos…-concluyo coherentemente Scorpius que seguía con una expresión reflexiva-
- Esto se esta poniendo peligroso, tenemos que averiguar que es, antes de que nos haga daño, averiguar y atraparlo… y- quiso continuar Lily pero la mano de Scorpius le indico que se detuviera…
-¡y nada! Niña suicida, no arriesgare mi pellejo en atrapar esa cosa, lo que debemos hacer es seguir con lo nuestro, si esa cosa se aparece de nuevo pues le damos la vuelta y seguimos por otro camino, bastante eh cambiado mis planes por ustedes, como para seguir jugando a ser los héroes… esto es Slytherin "molestia" no Gryffindor, aquí no somos héroes… date cuenta…- y sin decir mas, se levanto y se dirigió a las escaleras, pero fue detenido por la mano de Lily que sujetaba su manga
- ¿Esto ya se esta haciendo costumbre no?-dijo Scorpius refiriéndose a que Lily no era la primera vez que jalaba de su manga para llamar la atención.
-Yo se muy bien donde estoy ¡no necesito que me lo recuerdes cada instante! Y sobre el fantasma andante, por algo esa cosa esta haciéndose presente ante nosotros, no voy a dar la espalda porque esto no es un acto de cobardía ni de valentía, simplemente sobre vivencia, trato de protegerme… Si acudimos a ti, es porque eres mayor y el mas competente mago de Slytherin que conocemos… si no puedes ayudarnos perfecto ¡deja de estarme juzgando! ¡Si no nos ayudas entonces no nos sirves…!
- termino de echarle en cara Lily que trataba de serenar sus nervios y su agitación, para que Scorpius no los notara, este a su vez se quedo sorprendido por el repentino cambio de actitud de la pelirroja, la miro directamente interesado a los ojos por un momento y dando un tirón a su brazo para safarse, dio la espalda y subió algunos escalones… deteniéndose al cuarto… y dando aun la espalda les dijo-
-solo ayudare en averiguar si existe alguna otra criatura que reúna todas esas características, de ahí en mas no cuenten con migo…- y siguió subiendo las escaleras hasta llegar a su habitación, Lily aun seguía mirando el lugar donde había estado hace unos momentos el rubio, cuando una mano se apoyo en su hombro y noto lo rígido que este estaba-
-¿Lily estas bien?- fue la amable voz de William que pregunto preocupado por el mutismo de la pelirroja, pero Lily hizo algo inesperado, sus rodillas temblaron y cayo al piso de las escaleras diciendo- Scorpius Malfoy me odia…
Las semanas habían pasado y las clases habían continuado. William y Lily no habían tenido por el momento ningún otro encuentro con el fantasma caminante… así que el asunto se les había olvidado ya de momento. Lily había tropezado algunas veces con Scorpius en los pasillos, pero en cuanto lo veía huía como si del mismo Voldemort se tratara y por todos los medios intentaba no tratarlo, en las horas de comida se sentaba sin chistar entre sus dos hermanos, mientras solo miraba el plato y no levantaba la vista para nada… si William y Scorpius estaban en la sala común, subía inmediatamente las escaleras rumbo a su habitación y no salía de ahí hasta la mañana siguiente y para colmo de ella, también había visto al susodicho, platicar demasiado amistoso, con la ojos de plato desagradable, esa alumna de cuarto grado, que la despertó aquella vez… pero trato de no darle importancia, se contentaba al recordar que la tipa tenia el mismo nombre que la perra maltes de su primo Charlie. "Rumina" decían con tono despectivo Rose y ella, en las horas de la comida al pedirle algo a la slytherin, para la pelirroja eso era un consuelo.
Pero ese no era su mayor problema, lo que mas desesperaba a Lily Potter era que Scorpius Malfoy no daba muestras de querer hacer las paces con ella. Ni que se viera afectado porque ellos no se hablaran. Ni siquiera cuando se reunían los sábados con el Profesor Horace, solo llegaba se sentaba de brazos y quedaba callado por el resto de la reunión. Pero eso, esperaba la pelirroja esperaba que cambiara algun día.
William y Lily habían tenido ya sus clases de transformaciones donde la profesora Mc Gonagall les había dejado dos pergaminos sobre la historia de la transformación y sus avances.
El profesor Flitwick había enseñado a utilizar el Accio y todos los alumnos de primero se veían practicar por los pasillos convocando cuan infinidad de cosas se les ocurriera…
Nuevamente habían acudido con Hagrid, que mostró como tratar a un kappa japonés y la Profesora Luna Lovegood les había parecido encantadora en defensa contra las artes oscuras que ahora impartía, debido a que su anterior profesora Susana Blond resultara embarazada y tuviera que retirarse…
Todas las clases habían sido estupendas, solo faltaba la menos atractiva y que no había sido impartida mas que una vez por Hagrid que suplió al profesor tratando de dar la clase e introducirlos a la historia. Siendo un total fracaso, sin saber como termino contando, como es que su ahora esposa le había dado el si cuando le pidió matrimonio.
Pero la clase de ese día parecía ser más prometedora. Ahora parecía que las cosas serian diferentes y estaban algo entusiasmados ya que habían pasados dos semanas sin recibir su lección a pesar del intento fallido de Hagrid, esto se debía a que el antiguo profesor Cuthbert Binns por fin se había dado cuenta que estaba muerto y decidió que ya era tiempo de retirarse, esto habiendo pasado en la primera clase, de repente los volteo a ver y se dio cuenta que flotaba siendo un traslucido ser, simplemente dijo un "estoy cansado" y desapareció en la pared, siendo la ultima vez que se dejo ver, así que tardaron unas semanas en buscar el reemplazo pero parecía que por fin el ministerio y la dirección se habían puesto de acuerdo y el maestro sustituto había sido elegido.
Los tres chiquillos Yue, Lily y William ya habían tenido solo otra clases juntos, encantamientos. Transformaciones la compartían con Gryffindor y ahí habían podido ver a Hugo, así como también herbó logia, donde todos estaban de acuerdo que la clase del maestro Neville había sido genial, el profesor Longbotton había sido tan rápido en tomar a la mandrágora bebe y ponerla en su nueva maseta que no había necesitado colocarse las orejeras, todos los miraban con la boca abierta y muchos se rieron cuando el, les confeso que a su edad había quedado desmayado por no ponerse las orejeras correctamente…
Todos seguían conversando, Yue y Lily sentadas en el asiento, platicaban sobre si la profesora Lovegood le pediría a el profesor Neville que le sirviera como conejillo de indias para algun hechizo de defensa o una extraña teoría, que el profesor la ayudaría sin chistar. Muchos rumores había en que los profesores estaban muy enamorados pero nadie había comprobado esto.
William en el asiento de adelante, revisaba si traía los pergaminos adecuados, desinteresado por las conversaciones sobre teorías amorosas que formulaban sus dos amigas, a su lado su compañero de dormitorio Goro echaba miradas furtivas a las dos chicas que platicaban amenamente.
Un pequeño golpeteo que se escuchaba en los pasillos como si algo de madera golpeara contra el piso, atravesó de repente en el lugar, el sonido comenzó cada vez hacerse mucho mas fuerte y mas claro provocando que los alumnos guardaran silencio y estuvieran atentos a la entrada del salón, de repente de un solo golpe la puerta se abrió y una figura espectral apareció, causando en algunos sorpresa y en otros temor, el fantasma flotaba algo bambolearte como si cojeara y cuando lo hacia. Se oían golpetazos repetidos por el pasillo a su paso. Su cara era como si hubiera sido tallada en madera por alguien que tenía sólo una vaga idea de lo que son las caras humanas, y no demasiado experto con un cincel. Cada pulgada de piel parecía tener cicatrices. A pesar de la blancura espectral que por naturaleza tenían los fantasmas. La boca parecía a una incisión diagonal, y un pedazo grande de la nariz faltaba. Los ojos del fantasma era lo que lo hacían espantoso realmente. Uno de ellos era pequeño, oscuro, El otro era grande, como una moneda, y de un vivo azul eléctrico. Que resaltaba sobre la cetrina y grisácea piel del ser. El ojo azul se movía sin cesar, parpadear, y se enrollaba, abajo, y de un lado al otro, bastante independientemente del ojo normal, el fantasma miro a todos de repente con su ojo azul movible y los reviso uno por uno, deteniéndose por un momento en Lily y apartando la mirada de todos los demás, hablo con una voz de ultratumba y seriamente dijo-
-Soy el profesor asignado por el ministerio de magia y en común acuerdo con la dirección de este colegio.
Alastor Moody- comenzó a escribir la tiza sola en el pizarrón al mismo tiempo que el fantasma siguió explicando- Ex Auror, ex cazador de magos oscuros, la cárcel de Azkaban estuvo mucho tiempo abarrotada por que yo mande a esos infelices a encerrar en ese infierno y también victima fatal por el que no debe ser nombrado…
¡Y SI ALGUNO TIENE PROBLEMAS CON ESO, ES HORA DE DECIRLO! – les exigió enérgicamente mientras su ojo seguía girando sin control y continuo al ver que nadie se oponía a su cargo asignado- Mi misión en esta aula es concientizarlos sobre los crueles y sangrientos hechos que forman nuestra historia, sin que omita los terribles episodios que se vivieron en épocas en las que ustedes ni siquiera habían pisado el suelo de este mundo…. Describiendo los horrores vividos por magos y brujas que sacrificaron sus vidas, para que en este momento sus cómodos traseros estén sentados tranquilamente en estas aulas… Pero sobre todo mi objetivo es que ustedes nunca olviden que aunque estemos en épocas tranquilas, otro loco podría levantarse. Así que a partir de ahora en adelante ustedes deben estar en "Alerta permanente" –concluyo el profesor su curso de introducción al grupo de asustados alumnos de primer ingreso que se miraban contrariados…
Lily miro al fantasma y trago en seco, este paseaba cerca de ellos, siguiendo escrutando y revisando minuciosamente a cada niño que se encontraba y pensó que la pacifica y aburrida clase de historia de magia, nunca iba a ser la que describieron sus hermanos…-
Mmmm no lo eh podido leer completo por que no dispongo de mucho tiempo, pero me parece bien, muy bonita historia, y se ve que a ti nadie te limita (eso es muy bueno). sigue así, y te invito a que leas igual mi historia: CONFUSIÓN Y DESESPERACIÓN, no es tan buena como la tuya pero vale la pena, jejejeje
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